Tras la exploración observamos que tiene un acortamiento de gemelos, el talón en varo y un antepié pronado. En la huella plantar vemos un pie cavo 1º grado.
El diagnóstico clínico es una tendinitis de aquiles por pie cavo.
El tratamiento será una plantilla personalizada para alinear el retropié y relajar los gemelos. También aconsejo estiramientos básicos para la musculatura posterior de la pierna.
Realizo el molde con espuma fenólica en carga obteniendo el positivo.
En este caso la plantilla la confecciono de EVA con una cazoleta media para controlar la inestabilidad lateral de tobillo y una talonera corta de 5mm para relajar el aquiles.
La evolución fue bastante buena para el paciente, no volviendo a aparecer las molestias en el tendón de aquiles.